Ir al contenido principal

A Christmas Carol

 
Título Original: A Christmas Carol
Autor: Charles Dickens
Género: Novela
Temática: Ficción
Idioma Original: Inglés
Año Publicación: 1843

ARGUMENTO:

Ebezener Scrooge es un anciano solitario, cuya avaricia y egoísmo lo han llevado a una vida solitaria. Pero todo está a punto de cambiar. Tras rechazar la invitación de su sobrino para ir a cenar con su familia en Navidad, Ebezener regresa a casa, y en la oscuridad de las lúgubres estancias de su triste hogar, el espíritu de su ex socio Jacob Marley hace acto de presencia y le advierte del destino que le espera si no cambia de actitud. Le anunciará la visita de tres fantasmas que lo harán recapacitar.

MI LECTURA:

Hacer una reseña de un libro tan conocido y versionado como A Christmas Carol (Cuento de Navidad) es una tarea difícil. Se han dicho tantas cosas que intentar no caer en lo ya comentado es casi imposible. Así que a modo de resumen daré grandes pinceladas sobre la obra, para luego centrarme en mi visión particular y las sensaciones que he tenido con su lectura.

Nos encontramos ante una historia con trasfondo moral y secular que se aleja de la concepción religiosa de la Navidad. Dickens influenciado por su pasado y presente, refleja en la novela las consecuencias sociales que ha traído el progreso, la revolución industrial y la sobre población de las ciudades. 

El Londres de 1840 es una ciudad oscura llena de miseria. La clase trabajadora que nace con la industrialización carece de derechos, las jornadas son interminables y la explotación laboral está a la orden del día. No sucumbir al abuso de la maquinaria industrial significa vivir de la mendicidad. Aquellos que no consiguen un puesto en la industria se ven obligados a subsistir como pueden. La prostitución, el pillaje, la mendicidad crece y aparecen personajes como Scrooge, que a pesar de salir beneficiados de estas condiciones, menosprecian al ser humano que sufre esta revolución tecnológica.

La burguesía empieza a tener gran poder económico, la nobleza sigue anclada en tradiciones y costumbres y la transformación social se acelera. Los tiempos cambian y hay a quién le cuesta aceptar ese cambio. Nos encontramos en la conocida como Época Victoriana. La cultura empieza a llegar a la clase trabajadora y aparecen muchos creadores que sienten la responsabilidad y necesidad de educar y culturizar a la población.

En A Christmas Carol, Charles Dickens reivindica la Navidad como una herramienta eficaz para despertar la necesidad social del ser humano. Porque no podemos olvidar que el hombre es un animal social. Habrá quién sea más sociable o menos, pero está claro que la humanidad a su pesar, necesita del otro. Comunicarse y relacionarse con los demás da equilibrio y reconforta. Pero, volvamos al tema. ¿Por qué digo lo de herramienta? Pues porque la Navidad es una celebración familiar y social, hay muchas otras, pero en ésta hay un elemento religioso que se entremezcla con la cultura occidental y su visión de la esperanza. En Navidad, hay esperanza, nace el Salvador y, por tanto, hay futuro.

Y aquí nos encontramos con los fantasmas del pasado, presente y futuro. ¡Qué genial Dickens! Del pasado no aprendemos, lo olvidamos. Por eso, es tan importante conocer y tener presente el pasado, sobre todo, el histórico, tanto personal como global porque tendemos a olvidarlo. Y cuando volvemos a él, a conmovernos por nuestras experiencias, aunque sea por un momento, es cuando somos conscientes de donde venimos. Porque lo que somos hoy es consecuencia de lo que vivimos ayer. Y eso es lo que experimenta Ebenezer Scrooge. Despierta de su letargo, revive su pasado, se remueve su interior y se encuentra con sus sentimientos olvidados. De esta manera toma conciencia de su presente. Está solo.

Gracias al fantasma del pasado, Ebernez es capaz de valorar todo lo que se pierde en el presente. Si no hubiese viajado al pasado antes, el protagonista no habría empatizado con su presente. Al ver con el fantasma del presente y a los otros personajes disfrutar de las Navidades juntos, a pesar de su pobreza y sus problemas, se empatiza con ellos y empieza a surgir el deseo de revivir sentimientos olvidados como son el amor y la amistad.

Y entonces aparecen dos niños cuyos nombres son Miseria e Ignorancia. Muy simbólica esta aparición. Nos dice mucho más de lo que parece. Dickens vivió una infancia con muchos baches y muy alterada por la mala gestión económica de su padre, que debido a sus deudas fue denunciado y encarcelado y Charles tuvo que dejar la escuela para ponerse a trabajar a la edad de 12 años. Si bien, el cambio de estatus social de clase burguesa media a trabajadora, fue un cambio que le costó asimilar y aceptar, con el tiempo tomo conciencia de la situación de otros niños como él. La mayoría no sabían ni leer ni escribir y malvivían, pues pasaban muchas horas trabajando para ayudar a sus familias y aún así no tenían suficiente. Debido a su ignorancia y a su analfabetismo nunca podrían salir de la miseria. Esto marcó profundamente al escritor quién denunció en muchas de sus obras las condiciones en las que trabajaban y vivía la clase proletaria.

Como golpe final, la novela nos presenta el fantasma del futuro. En ese momento, Scrooge ya está bastante consciente de su situación, pero tiene que encontrarse con el final del camino que escogió para que el miedo le haga reaccionar y no olvide que el cambio sólo depende de él. Para ello, debe actuar ya.

La esencia de este cuento sigue intacto hoy día. Pues, aunque esté situado en la revolución industrial el fondo moral que posee es atemporal. Por ello, sigue siendo una de las obras más versionadas, algunas con más acierto que otras. Recuerdo todavía la película Los fantasmas atacan al jefe que fuimos a ver al cine unas Navidades porque salía Bill Murray de Los cazafantasmas. Creo que todavía estoy traumatizada por la película, vaya versión más... no sé, bueno, es una versión de humor.

Sobre la manera de escribir del autor he de comentar que muestra un gran dominio de la lengua. Juega con ésta para enfatizar y crear tensión a la narración. Y también, a través de ella, nos muestra el cambio que se va produciendo en el interior del protagonista. Por ejemplo, al inicio del libro Scrooge está continuamente utilizando la palabra humbug, expresión que significa bobadas, tonterías y cuya palabra significa también engaño. Cada vez que se refiere a la Navidad o a lo que simboliza, utiliza esta exclamación. A medida que avanzamos la narración Scrooge deja de utilizarla porque está interiorizando el significado de la Navidad y le está dando importancia. Ya no es una bobada.

Os dejo más abajo algunos links con más información sobre el autor y su obra. Y os recomiendo echar un vistazo al especial que hizo el diario El mundo en el bicentenario del autor. 

En resumen, ¿POR QUÉ DESPERTAR ESTE LIBRO? 

A Christmas Carol (Cuento de Navidad) es una historia que casi todo el mundo conoce por las múltiples versiones que se han hecho de ella, pero aún así, recomiendo leer la novela original para recuperar la esencia que guarda y la magia de su creador, pues leyendo la obra de Dickens nos acercamos a su obra y a su figura y la mantenemos viva. Una novela corta que guarda toda la emoción y dramatismo y nos conmueve después de tantos años de su creación.


Fuente de la imagen y de la lectura:
Dickens, Charles. A Christmas Carol. [Libro en línea] Atria Books; Edición: Enriched Classic (17 de diciembre de 2013). ASIN e-book B00H5SE1TG

Retos en los que incluyo esta lectura:
Reto 50 libros

Comentarios

  1. Lo leí hace dos navidades y me gustó: acercarme a este cuento tantas veces adaptado al cine estuvo genial. 1beso!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo no lo había leído y cuando propuso el blog No solo leo su lectura me apunté sin pensarlo, pero me ha durado mucho la lectura y eso que era cortito. Cosas que pasan.
      Un beso.

      Eliminar
  2. Hola te nomine a un premio en mi blog! http://labibliotecadelabruja.blogspot.com.ar/2015/03/premio-liebster-award-4.html#more

    ResponderEliminar
  3. Yo la leí hace mucho tiempo. Pero no es uno de los que más me gastan de Dickens. Eso si, creo que me he visto todas las versiones televisiva s existentes, porque cada vez que se anuncia no puedo evitar verla. Besinos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí me pasa lo mismo me gusta ver el cuento en diferentes versiones, algunas me gustan más que otras, pero eso depende de la gracias con la que hagan la versión. Tengo ganas de leer también Historia de dos ciudades, algún día me pongo con él.
      Un beso.

      Eliminar
  4. Me encanta! Lo he leído varias veces y siempre disfruto con su lectura.
    Besots!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es que la historia engancha y mantiene el interés del lector durante toda la lectura.
      Un beso.

      Eliminar
  5. Me encanta esta historia, el libro lo leí hace un montón de tiempo y luego he visto varias adaptaciones, creo que algún día releeré el libro, aunque de momento en inglés no me atrevo
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí me ha costado leerlo en inglés y a esto hay que sumarle que como ya conocía la historia lo he ido leyendo a ratos. Creo que por esa razón se me ha alargado tanto su lectura.
      Un beso.

      Eliminar
  6. De Dickens preferiría leer otro libro que esta historia me suena demasiado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que haces bien. A mí me ha gustado, pero conocer la historia de ante mano me ha hecho que no disfrutara del todo. Me ha faltado la sorpresa para redondear la lectura.
      Un beso.

      Eliminar
  7. Lo leí en Navidad y me gustó mucho, es una historia de valores y una lección que muchos deberían aprender. Un beso!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es verdad, es una historia de valores. Yo lo empecé en Navidad, pero se cruzó con otras lecturas y no lo acabé hasta mucho después.
      Un beso.

      Eliminar
  8. No la he leído, pero la tengo pendiente. Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo quería conocer la historia original y por eso me lancé a por ella. Lo que sí es verdad que al conocer la historia tan bien, no la disfrutas tanto. Aunque a mí me ha gustado mucho como nos cuenta la historia Dickens y ya sólo por eso vale la pena.
      Un beso.

      Eliminar
  9. ¡Aún lo tengo pendiente! Compré la misma edición que muestras aquí, en inglés. Ahora toca buscar el momento adecuado. ¡Además, ya va siendo hora de poner en marcha la lengua inglesa! Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí me costó un poco leerlo en inglés, quizás es porque me conocía mucho la historia y cuando encontraba alguna dificultad en la comprensión se me hacía pesado. Pero cuando ya llevas un tercio o así del libro, ya le coges el tranquillo al vocabulario y al estilo del autor y disfrutas de Dickens.
      Espero te animes a leerlo, ya nos contarás.
      Un beso.

      Eliminar
  10. Ay, qué raro se me ha hecho encontrarme con esta lectura a estas alturas de año :) (y con el sol luciéndose por todo lo alto).

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que sí, jajaja. Pero yo soy así, helado en invierno y sopa en verano. Bueno, a veces. Jajajajaja.
      Un besote.

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas Populares

Combatir los ácaros de los libros

La fuerza de la sangre

El señor Ibrahim y las flores del Corán

La vida ante sí - La vie devant soi